Oaxaca, Oax 31 Nov 18.- Las celebraciones por el Día de Muertos en Oaxaca comienzan desde la cosecha de la flor de cempasúchitl y cresta de gallo que utilizada no sólo en los altares, sino también en la decoración de los arcos que enmarcan la entrada de las ánimas en pena.
Los mercados despiden olor a copal y parafina, con los aromas se entremezclan los colores del papel picado, las flores, los vestidos típicos y el maquillaje para los disfraces de la temporada. En ese trajín de la búsqueda de artículos para el altar conviven habitantes de Oaxaca y los turistas de todas partes del mundo que quieren vivir de cerca esta tradición.
Entre los panteones más visitados están el Panteón General, los de Xoxocotlán y el de Atzompa. Primero llegan los deudos a limpiar las tumbas y adornarlas para preparar el acompañamiento, después llegan los visitantes que con cámara en mano se maravillan de este místico encuentro de los vivos con los muertos.
Así llega el amanecer, entre flores y velas y un ligero olor a mezcal que da la bienvenida a ese nuevo día en el que se recuerda a quienes se han ido.
EF/Staff – JAP – BEH